He dedicado mi vida a asesorar al contribuyente en sus obligaciones tributarias con Hacienda y siempre lo he hecho con honradez para quien solicitaba mis servicios, pero quiero destacar que la primera vez que en mis primeros estudios tributarios me leí el código tributario vigente en 1978, y pensé que la tributación en España para el contribuyente normal, era muy diversificada en pequeños impuestos, que en muchas ocasiones ni afectaban su vida y sus ganancias. Con la reforma y la Nueva Ley Tributaria y con la nueva Ley del IVA, allá por mediados de 1986 y ya en época socialista, se pasó de la recaudación a la confiscación de las ganancias del contribuyente, al que bien llamaron “sujeto pasivo”, ya que no podía hacer nada para mantener o guardar algo de su dinero viendo como le “volaba” con destino a la Hacienda Española capitaneada por Borrell.

Si uno lee detenidamente esas Leyes y se pone en el tejido empresarial, desde el pequeño al más grande, es imposible de cumplir con ellas, totalmente imposible porque la producción jamás puede estar por debajo de los gastos fijos y los impuestos, si no es defraudando y ahí nace el problema del desajuste fiscal. Por otro lado también es inadmisible que se sancione por todo con el 300% de lo que evalúen como evadido o no ingresado.
Las grandes empresas pactan sus impuestos con Hacienda porque tienen mucha gente en producción, mal pagados pero que son moneda de cambio ante Hacienda, si quieres cobrar también de mis trabajadores tienes que hacerme un “pequeño favor”, sino al paro. Por otro lado es inaguantable que Hacienda con los más débiles efectúen estimaciones indirectas sin pruebas objetivas y comprobables, que acaban con cualquier empresa sana y decente. Ya ni comento la indefensión que tiene un contribuyente asalariado.
Las grandes empresas pactan sus impuestos con Hacienda porque tienen mucha gente en producción, mal pagados pero que son moneda de cambio ante Hacienda, si quieres cobrar también de mis trabajadores tienes que hacerme un “pequeño favor”, sino al paro. Por otro lado es inaguantable que Hacienda con los más débiles efectúen estimaciones indirectas sin pruebas objetivas y comprobables, que acaban con cualquier empresa sana y decente. Ya ni comento la indefensión que tiene un contribuyente asalariado.

A la banca solo le importa ahora que salga ganando el dinero que ha “perdido” (siempre ha utilizado nuestro dinero, no él suyo; lo malo sería ahora que todos a la vez pidiéramos nuestro ahorro o dinero corriente en efectivo, sería un corralazo bancario). La verdad es que por habernos engañado vilmente, ahora en inmovilizado por viviendas desocupadas o embargadas, tienen tanto ladrillo que podrían hacer una nueva ciudad de 800.000 personas solo con los edificios, y eso si no se vende no genera nada más que gastos de mantenimiento. Tampoco pasa nada suben un poquito más sus comisiones y listo. Ya no quiero hablar de los mercados especuladores que siguen mintiendo para vivir ellos a costa de los demás, es igual también llegará su caída en un momento dado porque ellos mismos ya se están comiendo. Y a todo esto Hacienda muda, porque será.



El panorama actual esta crudo porque la gran mentira fiscal sigue trabajando cada día y como un rodillo que amasa el pan va atornillando a todos. Imaginemos que hoy queremos montar un pequeño negocio autónomo que nos permita vivir con un cierto sosiego, bien pero antes pensemos que el mini empresario lo tiene peludo desde hace muchos años con Hacienda, y si hacemos un pequeño pero ilustrativo ejemplo veremos que la cosa está mal, muy mal, para que veamos un futuro optimista.
Imaginemos una familia normalísima (matrimonio y dos hijos). El hombre crea un pequeño comercio cuyo margen de beneficio es del 30% mas o menos porque revende un producto comprado en distribuidor, está en un pueblo fuera de la ciudad, y vive en una casa de alquiler bajo, y su venta a pesar de ser constante es dificil porque hay mucha oferta.
Este negocio funciona como todos, y al año obtiene los siguientes beneficios:
Beneficios Antes de Impuestos 20.000 €
Menos 20 % pagos a cuenta IRPF anual 4.000.- €
Ajuste en la declaración de renta anual 400 €
Menos Cotización a Seguridad Social 2.880 €
Menos IVA indirecto de la alimentación, gastos personales y transporte 1.400 €
Solo en Impuestos y Cotizaciones el Total pagado al estado es 12.280 €, el 62% de los beneficios declarados. No contamos el 70% de impuestos de los carburantes, porque no podremos tener coche.
Que menos que 500 € al mes en alimentación y vestido para los cuatro. Al año 6.000 €
Un alquiler mínimo de 600 € al mes. Al año 7.200 €
Las escuelas si los hijos son pequeños hay que pagar la guardería. No Podemos.
No salen los números, ya estamos en -5.480 € de déficit anual. Mal vivimos.
Bueno no podemos comprar ninguna vivienda si la mujer no trabaja y dejamos los críos en otro lado. Iremos en transporte público. Las respuestas no son fáciles, y es que uno se pregunta caray pero si facturo 60.000 euros al año, si pero el estado te cepilla el 62% (12.280 €) de tus beneficios tan sudados que son 20.000 €. Ellos le dirán que gracias a que Hacienda somos todos y entre ellos Ud., tenemos una gran sanidad recortada por todas partes, la mejor enseñanza que se da en el mundo gracias a los ordenadores, que compran a medias con los padres porque los fabricantes de informática les untan bien. etc…

El ciudadano no puede estar sometido a una fiscalidad imposible de soportar. El ciudadano tiene derecho a una vida digna y a contribuir en proporción real a sus necesidades, nunca a los caprichos de un legislador que hace leyes que no se pueden cumplir, y por tanto son ilegales desde su creación. Si existe por nuestra parte una insumisión fiscal, tendrán que saltar de sus poltronas, no solo porque ellos no nos representan, sino que además tendrán que largarse sin nuestro dinero y el rabo entre piernas. Me refiero claro a todos los corruptos que no son pocos y que todos conocemos bien. Aún intentarán apuntarse al paro antes de irse, y capitalizarse si pueden. Vaya especie.
Y me voy a dar un paseo por la playa, porque la visión del mar me calma y recicla mis pensamientos, que me dicen que mi pobre pensión no llegará a final de mes y que peligra su integridad futura. Al menos pasear por la playa (no todas) es gratis por ahora, y eso adormece algo mis malos pensamientos.
Jordi M.
Jordi M.
Realmente no tiene ni una gota de desperdicio. si me permites lo volveré a leer, hay demasiadas cosas interesantes para que se escapen. Jori M, sugiero que temas como este los hagais a menudo, aunque sea en dos partes. Muchas gracias.
ResponderEliminarSaludos.
Esperem poder complaure't
ResponderEliminarJordi M.
Hay que leerlo dos y tres veces, pero además tenerlo en cuenta, es un post muy interesante como mucha información y verdad. Pasear por la playa no es suficiente, has de vivir en la ignorancia para no sentirte manipulado, atropellado y en total crisis de esperanza.
ResponderEliminarTe seguiré leyendo tal y como me ha sugerido mi amigo Josep Estruel.
didi.
Diana: Agraeixo el teu comentari i també vull dir-te que en això de perdre l'esperança si no s'em giren les neurones ho tinc clar, perquè he passat una greu malaltia i sincerament mai l'he perdut. Saps perquè? Perquè he confiat plenament en aquell equip mèdic de persones dedicades als altres tot i que els forcen a treballar en males condicions per las retallades. Gràcies a ells estic viu.També per aixó m'agrada passejar a la vora del mar.
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